-Fábula La Zorra y El Chivo-
Una zorra cayó inadvertidamente en un pozo y, por más es- fuerzo que hacía, no pudo salir de él. Entretanto, un chivo sediento le preguntó sobre la bondad del agua.
La astuta zorra, amablemente, se deshizo en alabanzas e in- vitó al chivato a bajar al pozo.
El chivo, muy ingenuo, saltó dentro del pozo y, después de saciar su sed, preguntó a la zorra cómo saldría.
—Muy sencillo —le respondió la farsante—: apoya las patas delanteras contra la pared y levanta los cuernos: yo subiré por ellos y luego te sacaré.
Así lo hizo, y la zorra, subiendo con agilidad, salió airosa de la prisión. Antes de partir dijo al cautivo:
—Gracias, compadrito. Si tuvieras tanto ingenio como pelos en la barba no hubieras bajado sin antes pensar, ¡Feliz prisión, amigo, y buena suerte!
Moraleja
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