-Fábula El León y el Delfín-
Por las costas de un país africano se paseaba orgulloso un león, cuando emergió de las aguas la cabeza de un delfín a quien el melenudo propuso:
—Siendo tú el Rey de la Mar y yo el Soberano de la Tierra, pactemos una alianza para socorremos.
Como era de suponer, el delfín aceptó la propuesta. El león, que tenía viejo con un bravísimo toro salvaje, llamó al delfín:
—¡Acude en mi auxilio, compañero!
El cetáceo, por más que se esforzaba, no pudo salir del agua, por lo cual el león desengañado lo trató de traidor.
—No soy traidor. La Naturaleza tiene la culpa de haberme creado acuático —contesto—, por eso me es imposible caminar en tierra.
Moraleja
A emprender lo imposible no hay quien nos obligue. Clic para tuitear